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26/11/08

Inauguran consultorios para veteranos de Malvinas. Es en el hospital Carrillo de Tres de Febrero. Será destinado a la atención de la salud mental de los ex combatientes. El pabellón se llamará Carlos Viegas...

Con el objetivo de crear un espacio propio para los veteranos de la guerra de Malvinas, el ministro de Salud Provincial Claudio Zin inaugurará este miércoles un pabellón en el hospital Ramón Carrillo de Tres de Febrero, destinado a la atención de la salud mental de ex combatientes.

“La apertura de estos nuevos consultorios es un derecho que los veteranos merecían desde hace años pero recién ahora pudo concretarse”, comentó la psiquiatra Liliana Alvarez Marimón, coordinadora del Programa Provincial del Veterano de Malvinas a cargo de la atención sanitaria de 500 ex combatientes y sus familiares.

La especialista recordó que durante años la atención sanitaria de quienes combatieron en Malvinas fue un tema privado y relegado en la agenda pública. En el periodo posterior a la guerra se estima que 350 veteranos se suicidaron, una cifra que supera las 323 bajas ocurridas durante la contienda (sin contar las 302 muertes del Crucero General Belgrano).

“Tenemos mucha demanda incluso desde otras provincias que no cuentan con dispositivos de contención similares”, contó Marimón y señaló que el programa bonaerense cuenta con una línea gratuita, el 0800-999-8348, atendida por veteranos y profesionales las 24 horas los 365 días del año. “Los que llaman pueden plantear inquietudes, pedir asesoramiento y se le va ofrecer, además de un oído atento, la derivación más adecuada posible”, agregó.

El Programa de Veteranos de Guerra bonaerense se inició en 1997 a partir de la propia iniciativa de un grupo de ex combatientes, que se acercó al ministerio de Salud provincial para reclamar asistencia específica. A partir de entonces, se generó el plan para ofrecer atención, sobre todo, en materia de salud mental habida cuenta de que los casos de estrés postraumático tenían una enorme incidencia entre ese grupo poblacional.

Según explicó Marimón, en la actualidad, las patologías que más se observan entre los veteranos son depresiones severas, adicciones y ludopatía.

Paliar el olvido

La psiquiatra Silvia Bentolila, coordinadora de la Red Provincial de Salud Mental en Incidente Crítico (Prosamic), señaló que durante los primeros años posteriores a la guerra de Malvinas, los soldados tenían una última orden por parte de la dictadura, “no hablar, esta tenía que ser una guerra para ser olvidada”.

Según la especialista este proceso de desmalvinizació n, que se prolongó incluso durante la democracia, no hizo otra cosa que perturbar aún más a los protagonistas de la guerra, “si la sociedad estaba sorda y muda entonces lo real irrumpe en la realidad, lo silenciado se muestra: 264 suicidios hasta 2001 en fechas que van en forma elocuente entre marzo y julio”.

Además, el sistema sanitario del país carecía, salvo honrosas excepciones, de una estrategia adecuada para el tratamiento de personas que participaron de acciones bélicas.

Recién en marzo del 1997 se pone en marcha el Programa del Veterano Bonaerense, que “fue una respuesta a la angustia de un grupo de ex combatientes, impulsados por la desesperación de ver tantos compañeros suicidados y la manicomializació n como única posibilidad de tratamiento”, concluyó Bentolila.