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Tras la publicación en El Malvinense sobre las exploraciones mineras en Tilcara, los pobladores están preocupados y comienzan a tomar medidas contra la minera canadiense del lugar...

Los pobladores de la ciudad de Tilcara están muy preocupados por la noticia de la existencia de un yacimiento de Uranio en el Amarillo, lugar que queda entre la localidad de Juella y la quebrada de Yacoraite, en la Colonia San José.

Esta empresa en Sudamérica tiene sus oficinas en Buenos Aires y en la provincia de La Rioja, donde están el director y el gerente de la misma. En Jujuy realizaron una presentación en el Juzgado de Minas mediante el legajo N° 121 U/2007, que consiste en el mapeo realizado para el informe de las consecuencias ambientales que ocasionaría en el futuro una explotación minera de Uranio.

En la Municipalidad de Tilcara no ingresó ningún permiso ni solicitud de ocupación de tierras para este tipo de trabajos, tampoco al Concejo Deliberante. La gente dice que los concejales deberían realizar una ordenanza que prohíba todo tipo de emprendimientos que pongan en riesgo el ambiente natural y produzca consecuencias en la salud de los pobladores. No quieren que suceda lo que aconteció en Abra Pampa con la contaminación de plomo en los niños y adultos por la empresa Metal Huasi.

Por otro lado dijeron en la calle que la región de la Quebrada de Humahuaca tendría que ser patrimonio de los pueblos originarios en contraposición de patrimonio de la Humanidad, que tienen conocimiento de que en la UNESCO ya está aprobado y ratificado por la Nación a través del convenio 169 de la OIT, pero que el Estado Provincial todavía no lo a llevado a la práctica.

El viernes 20 de junio pasado hubo una reunión en Juella, donde los vecinos del lugar en su mayoría habrían manifestado la aprobación de una explotación minera porque les significaba una fuente de trabajo, pero que desconocerían el impacto ambiental.

El pueblo de Huella está dividido en cuanto a opiniones; algunos expresaron que el yacimiento estaría dentro de una propiedad privada y que ellos a pesar de las protestas no podrían ir en contra de los intereses que genera un emprendimiento de esta magnitud.

Este problema está en las provincias de Chubut y en Salta y no quieren que se repita en la región. Más allá que el procedimiento sea legal traería serios inconvenientes y como pueblo tendría que resistir a esa legalidad. La gente manifiesta que a veces los gobiernos traen hechos consumados sin consultas previas a los vecinos, que en definitiva son los que sufren las consecuencias.

Con la unión y la fuerza se puede lograr que el Gobierno prorrogue los plazos de explotación minera y expresan que todos los vecinos deben pedirle al Gobierno que actúe en favor del bienestar de la sociedad y defienda los capitales invertidos en turismo, que es una fuente de trabajo para gran parte de la población.

Entienden que el Estado no puede hacer frente a las explotaciones mineras en contraposición con las empresas que si pueden correr el riesgo de las inversiones porque están capacitadas para ello, pero que regulen ese accionar teniendo en cuenta el impacto ambiental que generara a futuro.

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