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| Fuente:
Drew Benson / Bloomberg |
21/01/2009 |
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| El peso argentino en su punto más bajo desde su creación en 1992 | ||||
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Merrill Lynch se sumó esta semana a Morgan Stanley, Barclays Capital y Bank of America en el pronóstico de que la divisa del país gaucho no tendrá un buen desempeño en 2009... Una lenta caída La presidente argentina Cristina Fernández de Kirchner permitió que el peso se debilitara un 6,5 por ciento en el transcurso de los tres últimos meses y llegara a 3,4489 por dólar, en una declinación gradual destinada a apuntalar el crecimiento económico. Merrill Lynch se sumó esta semana a Morgan Stanley, Barclays Capital y Bank of America en el pronóstico de que el peso será la moneda de peor desempeño de la región en 2009. "Lo van a dejar caer poco a poco", dijo Alejandro Cuadrado, economista especializado en América Latina de Merrill en Nueva York. Merrill pronostica que el peso caerá a un nivel récord de 3,9 por dólar para fin de año. La mediana de los pronósticos en una encuesta de Bloomberg entre 12 economistas es que el peso finalizará 2009 a 3,95. Un vocero del banco central dijo que las autoridades tratan de evitar una fluctuación abrupta de la moneda y que no tienen un objetivo específico en relación con el tipo de cambio. Los depósitos La declinación del peso desde mediados de octubre es la más pronunciada de América Latina, mientras que el real brasileño se estabilizó y cayó sólo un 0,1 por ciento luego de cotizar al nivel más alto de los últimos nueve años en agosto. El peso cayó en 33 de las últimas 41 sesiones y bajó durante 18 días consecutivos, el período más prolongado desde su creación -en reemplazo del austral- en 1992. Permitir que la moneda se debilite puede desalentar a los ahorradores en relación con mantener dinero depositado en los bancos de Argentina, dijo Sebastián Vargas, economista de Barclays en Nueva York. En el 2001, un pánico bancario contribuyó al derrumbe financiero del país en diciembre de ese año, al entrar el Gobierno en cesación de pagos de una deuda de 95.000 millones de dólares. El peso cayó un 74 por ciento en seis meses y llegó a un nivel récord de 3,86 por dólar. Los compradores de dólares hicieron fila en las aceras de Buenos Aires en dos ocasiones el año pasado: durante una protesta de cuatro meses por productores rurales que interrumpió el abastecimiento de alimentos hasta julio, y una vez más al anunciar la presidenta en octubre que planeaba nacionalizar los fondos de jubilación privados. |
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