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18/11/2009

 

Tras la avería del Hércules, regresó el personal antártico  

Tras las serias averías de un Hércules C130, la Fuerza Aérea envió un nuevo avión el día lunes hacia la Antártida que trajo al personal que pasó un año en las bases de la Antártida Argentina.

Solo hay un avión disponible para garantizar los vuelos el Polo Sur.

Pese a que el día cinco de noviembre pasado, el Hércules C-130 que estaba reaprovisionando las bases antárticas, sufrió averías de consideración, y al haberse suspendido los vuelos, el día lunes se deció enviar otro C-130, el único que queda en condiciones para cumplir con la misión de regresar a la dotación número cuarenta al continente.

La dotación saliente de la base Marambio arribó hoy al mediodía, al sector militar del Aeroparque Jorge Newbery en un avión Hércules C-130 después de prestar servicio durante un año en ese destino antártico, informó un comunicado de la Fuerza Aérea.

Lo que no informa la Fuerza Aérea es que dado a las averías sufridas a principios del mes, los vuelos y el regreso del personal se vio demorado, ya que el estado de los aviones de la Fuerza Aérea, no es el mejor, por la falta de presupuesto.

Pese a todo, los pilotos de la aviación argentina cumplieron una vez más con la misión de regresar al continente, el personal que durante todo un año prestó sus servicios en el territorio blanco.

La dotación fue recibida en una ceremonia con la presencia de sus familiares y encabezada por el jefe de la Fuerza Aérea, brigadier Normando Costantino.

Un solo avión para realizar los cruces a la Antártida

La agencia de noticias Télam, informa que un Hércules C-130 regresó a casa al personal antártico. Sin embargo solo hay dos C-130, que son aptos para aterrizar en Marambio. Uno averiado el pasado cinco de noviembre y el otro en condiciones apenas aptas para realizar vuelos al Polo. Pese a que la Fuerza había decidido suspender los vuelos, no tuvo otra opción que enviar el último Hércules que sirve para la pista de Marambio.

Se utilizó dicho avión, matrícula TC-70, que partió el lunes desde la Base de Palomar y que hoy trajo al personal antártico.

Marambio es la única base del Sector Antártico Argentino con una pista apta para aterrizajes de aviones de gran porte. La isla amesetada se eleva a unos 200 metros sobre el nivel del mar y su pista de aterrizaje permite que operen aviones de transporte como el Hércules C-130 durante todo el año.
La Fuerza Aérea mantiene un servicio aéreo único y permanente desde el territorio continental para el traslado de personal y apoyo logístico. Sin embargo, este servicio aéreo ahora está garantizado tan solo por un solo avión.

Por mar, depende de la contratación de un rompehielos a un país extranjero, ya que el rompehielos Alte. Irizar no será reparado en varios años más. Ahora por aire, posee solo un avión con las características necesarias para realizar vuelos a la Antártida.

Argentina está al borde de depender de Estados extranjeros para garantizar su presencia en el continente blanco. La falta de presupuesto, el desmantelamiento de la Defensa Nacional y el silencio cómplice de los Altos Mandos, deja a la Argentina, con un pié afuera del continente más codiciado del mundo del siglo XXI.

 

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