|
||
|
||
|
31/05/08 |
|
Gendarmeria evocó a los caídos en Malvinas | ||
Con motivo de conmemorarse el 26º Aniversario del “Bautismo de Fuego” de Gendarmería Nacional Argentina en el conflicto bélico del Atlántico Sur, este viernes 30 de mayo se realizó una emotiva ceremonia en todo el país. LOS 7 HÉROES
DE LA GENDARMERÍA NACIONAL Esc Seg "ATUCHA" 1er Alferez SÁNCHEZ Julio Ricardo Esc Ser Apoyo GN Subalféez NASIF Guillermo Jef Región I Sarg Ay ACOSTA Ramón Gumersindo Esc 34 "BARILOCHE" Cabo 1º VERON Marciano Esc 42 "CALAFATE" Cabo 1º GUERRERO Víctor Samuel Rae 36 "ESQUEL" Cabo PEREYRA Carlos Misael Esc 31"LAS LAJAS" Gendarme TREPPO Juan Carlos
El siguiente discurso se pronunció el año pasado, pero vale la pena colocarlo nuevamente, pues es igual de emocionante: PRONUNCIAMIENTO DEL Cte GENERAL SPADARO, CON MOTIVO DEL BAUTISMO DE FUEGO DE GN EN MALVINAS. DIGNAS DE UN GENDARME Un cuarto de siglo atrás, en este día, seis gendarmes dieron el máximo testimonio y entrega exigible a un soldado de la Nación, en acción de combate, en la guerra por la recuperación de un sector territorial usurpado.- Así de extraordinario es el hecho que Gendarmería evoca hoy en su bautismo de fuego en una Guerra por la Soberanía y así de compleja su caracterización, por el contexto histórico en que ocurre. Son estas dos razones que me indicaron la conveniencia de escribir el dictado del corazón y de la razón, antes de dar rienda libre a palabras que pudieran no reflejar la trascendencia de este acto. He meditado este mensaje que expreso en mi nombre y del Escuadrón que tuve el honor de comandar en 1982. El 30 de mayo, el helicóptero que transportaba a la Patrulla del 2do Cte San Emeterio fue alcanzado por el fuego enemigo, llevándose a la gloria a Sánchez, Nasif, Verón, Guerrero, Pereyra y Treppo. El Gendarme Juan Carlos Treppo, el Cabo Misael Pereyra y el Subalferez Guillermo Nasif, entre los caídos, apenas pasaban los 20 años de edad, con sueños e ilusiones de una juventud que transitaba el final de una época de trágicos enfrentamientos y desencuentros en la historia. Nasif, autorizado por el Director de la Escuela de Suboficiales de Mercedes donde revistaba, apareció de pronto en la Dirección Nacional donde se estaban designando a los cuadros que me acompañarían y me dice: Soy comando, vengo autorizado por el Cte My Zorzenón a solicitar se me incorpore a su unidad... " Así de simple. De nada sirve un recuerdo, si se desenvuelve apremiado por el olvido o de explicaciones condescendientes o desorbitadas y deformadas de aquélla historia, en la que aunque haya sido fugazmente, desde 1833, fue suficiente para que volviera a ondear nuestra bandera celesta y blanca, elevada con dignidad sobre la turba de Puerto Argentino y demás territorio insular. La Institución, trasciende siempre a sus integrantes y permanece inalterable, si no se aparta del destino de hidalgo servicio a la Patria. Por eso, los veteranos de Gendarmería sabemos con claridad que nuestros nombres, en definitiva, no son esenciales a esta Historia; pero si lo es la del Escuadrón Alacrán. Esa es la impronta que ha marcado nuestras vidas desde 1982 y el silencio, que solo se interrumpe cada vez que en algún instituto contamos algunas de las historias; sin otro objeto que el de inclinarnos ante nuestra Gendarmería, que es la matriz que creo al Escuadrón Alacrán, en sus valores, en sus símbolos, en el destino de cada uno de nosotros.- Cuando un veterano rompa esta matriz de austero comportamiento frente al Juicio de la Historia, solamente será posible admitirlo porque las cicatrices de aquellos días se reabrieron, para enfermarlo en su mente antes que en su espíritu. ¿Porque fuimos a Malvinas? Cumpliendo una orden. Pero la realidad era que también, queríamos estar. Preguntad esto a cualquiera de los veteranos aquí presentes y escucharan una sola respuesta afirmativa. La atrocidad de intentar desvirtuar este ultimo sentimiento, nacido hace varios años al conjuro de la expresión "chicos de la guerra", durante un indisimulado proceso de desmalvinización - afortunadamente interrumpido en estos días - han quedado como interpretaciones de pequeños e indignos espíritus de facción, que configura una señalada Traición. En esta breve historia de Gendarmería en Malvinas, no conocí
un solo gendarme que no hubiera deseado integrar aquélla Compañía
de Tropas especiales 601 de Gendarmería, convocada a las Armas
por el Ejercito junto con las entrañables y ejemplares compañías
de comandos 601 y 602 de los Mayores Rico y Castagneto.- Pequeñas y olvidables anécdotas, que solo las traigo al presente, para reafirmar algunas cuestiones fundamentales en este aniversario del Bautismo de fuego de Gendarmería: - La Nación no se construye desde el olvido ni la parcialidad!!!.
Nunca es una obra terminada y es su pueblo siempre, el mas firme centinela.- Nuestro balance final de esta historia abreviada en que 69 gendarmes dieron el siguiente Testimonio: Protección y vigilancia terrestre durante el conflicto en Comodoro
Rivadavia, por la sección que luego de intentar dos desplazamientos
aéreos, debió regresar desde Malvinas bajo fuego enemigo
que impido el aterrizaje. Dentro de unos días, recordaremos en Formosa al último de nuestros caídos: Sarg Ay. Acosta. He solicitado permiso a la hermana de Acosta, incansable abanderada de Malvinas, para hacer hoy una mención singular, pero necesaria en estos días. Acosta, solidario, sereno, de férrea disciplina y arquetipo del Gendarme, fue a entregar su vida por la razón que fuimos todos: Integración Nacional. Pero en él, esta afirmación tenía una doble implicancia porque llevaba consigo una llaga enorme que nublaba los sentimientos de toda su familia y de la que hasta hoy, nunca hemos referenciado, pero es imprescindible hacerlo. Acosta, trascendió también - aunque pocos lo sepan- como
ejemplo de la Argentina turbulenta de la década del 70. Ese es, señores, el espíritu de Malvinas. Nos recordó
lo que ya sabíamos en la maldita confusión y odio de aquellos
días en el continente: que un argentino jamás puede confundir
a otro argentino como enemigo y que la vida que se pierde, es la mayor
frustración de la humanidad, y una tragedia en cualquier circunstancia. A 25 años, que esta historia vuestra - el Escuadrón Alacrán es Gendarmería- y de la Familia Acosta, nos permita identificar símbolos para todos: la unión nacional, por encima de las facciones de la Historia. Por último: Ejercito Argentino: Gracias por haber creado la Ca de Tropas Especiales 601 de Gendarmería y reconocer en ese acto, la irrenunciable calidad militar de la Gendarmería, que nació de tus filas en 1938. - Familia de los veteranos presentes y de aquellos con situación de revista eterna en Malvinas: Perdón por todos los que te han olvidado o ensañado con recuerdos y dichos que parecieran afirmar que todo fue una aventura inútil, Perdónalos, porque no saben lo que hacen y si creen saberlo, son simplemente ignorantes de cómo se escribe la Historia y como se construye una Nación: solo andando el tiempo, sin beneficios de inventarios, e implacablemente. Gracias porque representáis lo mejor de todos nosotros y porque
las paginas más heroicas de aquellas jornadas, fueron escritas
por ustedes con el corazón sobrecogido en la esperanza del regreso;
con la mirada escrutando miles de kilómetros imaginando y rezando
por el regreso para la continuidad de los sueños compartidos
con vuestros hijos, hermanos, esposos o padres; o ayudando abrupta y
dolorosamente, a cumplir el mandato testamentario en plena guerra, respecto
de lo que Sánchez había expresado como ultima voluntad:
que entregaran a Betty y Cinthia, el Sable de Güemes o ya acompañando
primero al General que llevaba la noticia de muerte, a la esposa del
vecino de barrio a quien habías visto partir y escuchar mi insolente
e incumplida promesa de que se lo traería de regreso. O las hermanitas
de Treppo, que durante largos años seguían esperándolo,
al creerlo sobreviviente del misil. O al Cte My Nasif y familia, guardando
recatada fortaleza. O a los padres de Guerrero en Formosa, que un día
encontré vendiendo chipas para sobrevivir o de su digna esposa
que hoy nos acompaña. Patria Amada: es tiempo que te pidamos perdón, porque nuestras
armas y no otras razones, - mas allá de los errores - resultaron
insuficientes para reconstituirte íntegramente y permitir que
nos cobijes a todos, sin mutilaciones, sin odios, sin mantos de neblinas,
y con la piedad de Cristo, nuestro Señor, a quien todos nos encomendamos,
ayer y hoy, de la mano del querido Capellán, padre Astolfo, seguramente
muy cerca hoy de Ti, con Santos, San Emeterio, Pardo, que partieron
después a unirse en el cielo, con las almas de los que yacen
en Malvinas.- José Ricardo Spadaro |
||
Si quiere dejar su opinión puede enviar un
e-mail a: COPYRIGHT (c) 2007 ELMALVINENSE. Todos
los derechos reservados. Capital Federal-Buenos Aires-Argentina. |
web diseñada para una resolución óptima de 800x600