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Envía esta noticia a un amigo | 14/02/2013 |
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El
régimen totalitario de Malvinas jamás podría lograr
un referéndum democrático |
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Mucho se dijo, se dice y se dirá acerca del referéndum en Malvinas de marzo de 2013. La “consulta” es convocada por el actual gobierno ilegítimo de nuestro archipiélago para... “Los soldados británicos, que dieron
sus vidas para Mucho se dijo, se dice y se dirá acerca del referéndum en Malvinas de marzo de 2013. La “consulta” es convocada por el actual gobierno ilegítimo de nuestro archipiélago para determinar si su actual población desea continuar perteneciendo al Reino Unido como Territorio de Ultramar. Mientras prepara esta artimaña seudodemocrática con el fin de convencer al mundo de cuan democráticos son, en realidad continúan militarizando y hasta nuclearizando el Atlántico Sur. No sería extraño que, en una realidad plagada de verdad-virtual (hasta en tantas ocasiones opuesta a la única verdad: la realidad) terminen convenciendo a muchos. Tengamos en cuenta que Gran Bretaña, tras medio siglo de negarse a negociar la soberanía en Malvinas con nuestro país, inclusive contradiciendo las resoluciones de las Naciones Unidas, (organización en la que pertenece al exclusivo “club” de países que tienen el privilegio antidemocrático de vetar sus decisiones) continúa manteniendo el enclave colonial, lo arma hasta los dientes, se expande hacia todo el Atlántico Sur –incluyendo la Antártida- y decide ser paladín de la democracia internacional consultando a su población británica colonial trasplantada si desea continuar siendo británica. Es el gobierno colonial de Malvinas, (“El Régimen”, como lo nombra el ciudadano inglés Bingham -casi podría decirse un exiliado de la colonia- asemejándolo a los regímenes nazi y fascista de la Europa de la 2º Guerra Mundial) quien convoca a este referéndum. Pero veamos ¿cómo es este gobierno actual de Malvinas, cómo se integra, cómo gobierna y si en realidad está en condiciones de poder convocar a un referéndum creíble?. EL GOBIERNO DE MALVINAS “En Malvinas no hay un gobierno independiente elegido libremente por sus habitantes” (1). El gobernador, que representa en todos los actos públicos a la corona de Su Majestad Británica, “más que un gobernador es un virrey” (2). Al gobernador lo acompañan en el ejecutivo otros dos funcionarios británicos no electivos. “El Ejecutivo, por lo tanto, queda fuera de la voluntad popular”. Casi el 40% de la Asamblea Legislativa pertenece al gabinete del gobernador, y no hay división de poderes. Sólo 8 miembros de esta asamblea son elegidos por el sufragio universal, “pero en forma individual, porque en el territorio de las Malvinas ¡no se permite la creación de partidos políticos!” (3). De estos 8 miembros 5 son nacidos y se criaron en nuestras islas, los otros 3 llegaron a Malvinas a partir de 1984 y están vinculados a las Fuerzas Armadas o al gobierno inglés. “Es decir, en los hechos, los malvinenses no gobiernan en las Malvinas sino ciudadanos británicos radicados en Puerto Argentino que juran fidelidad eterna a la Reina y los intereses del gobierno británico por sobre los intereses de la comunidad colonial. Son ellos quienes deciden la dilación de este conflicto entre el Reino Unido y la Argentina. Actúan en representación de una población multinacional constituida sobre la base del control migratorio colonial, en la que los argentinos y el habitante “desleal” son discriminados, y cualquier súbdito de Su Majestad que se instala forma parte de su cuerpo electoral en pocos años. Así, el sistema es infalible. Ha sido pulido de tal manera que es difícil, tal vez imposible, revertirlo tornándolo más abierto, más tolerante a opiniones distintas y flexibles. De esta manera, se garantiza, por ejemplo, un control férreo sobre el tema de la soberanía y la reapertura del libre comercio con la Argentina. Para vivir tranquilo, el parroquiano no debe opinar sobre asuntos tan espinosos y mucho menos, demostrar ser accesible a debatir ciertas consideraciones tolerantes” (4). CÓMO “FUNCIONA” EL GOBIERNO DE MALVINAS En 1992, a 10 años de la Guerra del Atlántico
Sur, se instala en Malvinas el biólogo británico Mike
Bingham con la intención de estudiar la fauna y el medio ambiente
del archipiélago. Realiza un censo de la población de
pingüinos constatando que la misma se redujo de 6 millones de individuos
en 1984 (Investigación Antártica Británica) a 1
millón de ejemplares en 1996. “En 1982 les dijeron a las
tropas inglesas que enviaron a Malvinas que estaban liberando una isla
con 2000 personas y 6 millones de pingüinos. En el 2002 el número
de pingüinos había caído abruptamente a sólo
un millón” (5). ¿Qué les había ocurrido
a 5 millones de pingüinos que desaparecieron de su antiguo paraíso
austral?. Enterado del informe de Bingham el gobierno de las islas procederá
como un verdadero régimen totalitario. Comienza solicitando la
eliminación del escrito. Al no lograrlo, lo desestima, pero cuando
los resultados de Bingham fueron terminantes en cuanto a la desaparición
de las aves, comienza su demoledora tarea fascista. Le echa la culpa
a un “descenso mundial” de desaparición de este tipo
de fauna. El Dr. Bingham, observando que la caída coincidía
con el establecimiento de la depredación pesquera en torno a
Malvinas, decide –costeándolos de su propio bolsillo- realizar
censos evaluativos en las colonias pingüineras de Chile y Argentina.
Recordemos que las flotas extranjeras compraban las licencias o permisos
de pesca “extendidas por la administración colonial en
ocupación, a través de un minúsculo y privilegiado
grupo de residentes –no más de 7 u 8 personas- de Puerto
Argentino” (6). Mientras tanto se produce un derrame de petróleo
de un barco y aparece una cantidad de cormoranes muertos empetrolados
sin que el gobierno de las islas hiciera nada para resolver la situación.
En realidad sí hizo: prohibió al Dr. Bingham el ingreso
a las zonas del desastre así como realizar declaraciones sobre
lo ocurrido. Aclaremos que esto sucedió antes de que comenzara
la exploración petrolera en torno a Malvinas. Cuando Mike Bingham
regresa a Malvinas con las cifras de que el descenso brusco de pingüinos
ocurría exclusivamente en las islas, Inmigración y Aduana
de las islas rechazaron –sin razón- su permiso de residencia.
Al mismo tiempo, a través de una falsa organización conservacionista,
editan un libro con cifras totalmente inexactas de las poblaciones de
pingüinos, mientras ofrecen al Dr. Bingham sobornos financieros
ocultos en un aumento salarial excesivo o la amenaza de su despido.
Lo amenazan con echarlo de las islas por ciudadano indeseable. Sucedió
que el estudio del biólogo determinó que la causa de la
desaparición de los pingüinos era la muerte de hambre, al
quedarse sin peces y calamares por la masiva depredación pesquera
que los dejaba sin alimento. El ingreso anual, casi enteramente proveniente
de la pesca comercial del gobierno de Malvinas, era de 90 millones de
dólares anuales. A las pocas semanas de comenzar la exploración
petrolera hubo tres derrames en sitios diferentes produciendo la matanza
y contaminación de cientos de pingüinos, cormoranes y otras
especies y aparecen manchas de petróleo en aguas malvinenses. ¿PUEDE UN RÉGIMEN TOTALITARIO REALIZAR UN REFERÉNDUM DEMOCRÁTICO? El actual gobierno virreinal –o administración colonial- de Malvinas, no sólo es ilegítimo sino también -como acaba de demostrarse- absolutamente antidemocrático. Por lo tanto carece de una mínima cuota de potestad moral como para convocar a un referéndum que alguien pudiera, al menos vislumbrarle un sesgo democrático. Pero dejemos en la palabra de algunas de las víctimas del “régimen de Malvinas”, los últimos comentarios. La ex-esposa de Bingham comentará que “a pesar de haber vivido el régimen de Pinochet, consideraba a las Malvinas como el lugar más corrupto en el que había vivido” (9). “En la sociedad de Malvinas se filtraba un laberinto de corrupción. Cada engranaje de la comunidad malvinense estaba virtualmente dirigido o manejado por el gobierno”(10). “Dudo que en algún lugar sobre la Tierra, la corrupción del gobierno esté más difundida dentro del mismo seno de la sociedad. A través de la policía, Inmigración y Aduana, la estación de radio, el diario, el hospital y el correo, el Régimen de las Malvinas puede manipular y entrometerse en casi cualquier aspecto de la vida privada, si están motivados. A esto hay que agregarle la creencia, en los estratos más altos del gobierno, que están por encima de la ley y entonces, uno llega a la conclusión que el estado está podrido hasta la médula. Que semejante régimen corrupto funcione bajo la protección del gobierno británico, es una desgracia para todo trabajador honesto”. “Los soldados ingleses dieron sus vidas en 1982, con la falsa creencia que estaban sosteniendo la democracia. Estos hombres hicieron ese sacrificio para asegurar que la gente de las Malvinas tuvieran derecho a vivir libres de la tiranía política, libres para mantener sus creencias y opiniones, sin opresión. Es irónico que, después de 22 años que las tropas británicas murieran en pos de la democracia en las Malvinas, un ciudadano británico se viera forzado a huir de las Islas para escapar de la corrupción política y las amenazas de muerte y buscar la democracia y libertad de expresión en Argentina” (11). Hagamos la salvedad de que Bingahm , al escribir, separa a Malvinas de Argentina. Nosotros sabemos que se trata del territorio de un solo país: Argentina, y que en realidad se hace referencia a dos de sus sectores: una parte continental y otra insular. Citas (1), (2), (3), (4), (6) : Betts Goss, Alejandro –Malvinas Identidad Nacional- Córdoba, Insignia -2012- El Sr. Betts se radicó en Córdoba tras tener que dejar suelo malvinense luego de la batalla de 1982. Pertenece a una familia que durante 6 generaciones habita Las Malvinas. En nuestro archipiélago se encuentra, actualmente, parte de su familia. El libro aludido es el cuarto que escribe sobre nuestras Islas Malvinas. (5), (7), (8), (9), (10) : Bingham, Mike - El Régimen
de Malvinas- Río Gallegos, Autor -2006-
Director de la Biblioteca Especializada Malvinas Argentinas,
Santa Clara del Mar, provincia de Buenos Aires Para comunicarse con el autor:
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