Poco antes del acto patriótico de la Plaza Islas Malvina en Ushuaia, se plantó y cementó este cartel en Puerto Madero, frente a las oficinas de la multinacional Repsol...

Por Juan Antonio López, Ushuaia.(27/07)- Los actos unilaterales violatorios a la normativa nacional e internacional que por la fuerza ejerce el Reino Unido sobre los recursos naturales de la Cuenca de Malvinas y Atlántico Sur se remontan a la denominada “Misión Shackleton”, que desembarcó en la capital del archipiélago con fines de “exploración”, el 3 de enero de 1976.

Exactamente y no por casualidad, en el 143 aniversario de la usurpación. El 14 de ese mes, cuando el embajador inglés expresó al canciller argentino que “Inglaterra hace lo que quiere en el Atlántico Sur”, fue intimado a devolver sus credenciales de inmediato. El 4 de febrero, el RSS Shackleton zarpó con tripulación de “científicos” a “explorar” el mar contiguo a las islas. Y por orden presidencial fueron obligados, mediante salvas de advertencia del destructor Storni, a regresar a puerto. El 17 de marzo, la Asamblea Legislativa resolvió citar al nuevo embajador para informarle de nuestra decisión soberana de dejar sin efecto el arbitraje de la Corona Británica sobre el conflicto del Canal de Beagle, por haber sido ese acuerdo un acto del gobierno de facto del Gral. Lanusse. Y comunicarle que si no comenzaban de inmediato las negociaciones al respecto de la descolonización de las Islas Malvinas dispuestas por la Asamblea General y el Comité de Descolonizacion de la ONU, se cortarían las relaciones con el estado usurpador. Esa reunión debía ocurrir una semana después, el 24 de marzo de 1976 a las 10 de la mañana.

La nueva usurpación militar, consumada el 14 de junio de 1982 a costa de la vida de nuestros queridos 649 héroes. El despojo del Cabo de Hornos. Los Acuerdos de Madrid y las “relaciones carnales” que incluyeron el ingreso de la Argentina en la OTAN. El “paraguas de soberanía” y los acuerdos de pesca, la reforma de la Constitución Nacional entregando el subsuelo y todo el patrimonio nacional al saqueo internacional, no son más que la zaga encubierta o desembozada de las pretensiones colonialistas de Inglaterra.

La presencia de buques con bandera inglesa o de conveniencia operando en aguas territoriales contiguas a las Malvinas es una afrenta y un insulto a la memoria de los compatriotas que entregaron su vida por la afirmación de nuestros derechos en las Islas Malvinas, Georgias, Orcadas y Antártida Argentina. Dichas acciones no resultan admisibles dado que perjudican los derechos de soberanía de nuestro país y a la vez contribuyen a afianzar los de la potencia usurpadora.

A través de sus representantes y afirmados en la movilización popular, las ciudades de Mar del Plata, Ensenada y Berisso, Comodoro Rivadavia, Puerto Deseado, Río Grande y Ushuaia han expresado su genuino y legítimo REPUDIO, RECHAZO, BLOQUEO y EXPULSIÓN de los buques piratas y sus helicópteros de apoyo logístico.

Por todo lo expuesto es que rechazamos la navegación, permanencia, amarre, abastecimiento o operaciones de logística en territorio provincial de los buques de bandera británica o de conveniencia que realicen tareas relacionadas con la exploración, perforación o explotación de recursos naturales en la cuenca de las Islas Malvinas, sobre la plataforma continental argentina.

Poco antes del acto patriótico de la Plaza Islas Malvina en USHUAIA, se plantó y cementó este cartel en Puerto Madero, frente a las oficinas de la multinacional Repsol , que se apoderó en forma fraudulenta de YPF y de las acciones de los trabajadores.

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