La ex primer Ministro fue operada con "éxito", informan sus parientes. Como decíamos, no ha sido una simple fractura en su brazo y se esperan los resultados de la operación...

La ex primera ministro británica Margaret Thatcher ha sido sometida con éxito a una operación para insertarle una aguja en el brazo que se fracturó al sufrir una caída en su casa, confirmó hoy su hijo, Mark Thatcher.

No obstante, Thatcher, de 83 años, deberá permanecer en el Chelsea and Westminster Hospital (centro de Londres) hasta el próximo miércoles como muy pronto, precisó su hijo a las puertas del centro médico.

"No hay perspectivas de que ella abandone (el hospital) durante el fin de semana", indicó Mark Thatcher, al declararse "aliviado" y "encantado" por el resultado positivo de la operación.

(de la corresponsal de EUROPA PRESS, Eva Martínez Millán) La ex primer ministra británica Margaret Thatcher está siendo sometida a una intervención quirúrgica rutinaria en el brazo que se fracturó la pasada semana, cuando sufrió una caída en su residencia que la ha mantenido hospitalizada desde entonces, aunque se encuentra en buenas condiciones de salud.

La operación ha sido planificada para aplicarle un pequeño dispositivo que permita favorecer la cicatrización y le será realizada en el mismo centro médico de Chelsea y Westminster al que fue trasladada el viernes.

No obstante, Thatcher está "bien", según confirmó su hijo Mark, quien explicó que habla con las visitas que recibe, restringidas a la familia y a un reducido número de amigos. Otra de sus hijos, Carol, no ha ido aún por el hospital porque esta semana fue operada de un ojo, pero según su hermano ha estado en contacto permanente.

En principio la conocida como la 'Dama de Hierro' iba a abandonar el hospital el mismo día de la caída, pero finalmente su avanzada edad y antecedentes de achaques en los últimos años aconsejaron su permanencia en observación. Finalmente, será sometida a la operación para acelerar la cura de la fractura.

ANTECEDENTES

Desde 2002, la veterana política conservadora había reducido el número de intervenciones públicas por consejo médico, debido a una serie de contratiempos de salud de carácter menor. El último se produjo en marzo de 2008, cuando había pasado una noche en el hospital debido a un desvanecimiento, si bien abandonó el centro médico por su propio pie tan sólo 24 horas después.

Los últimos episodios en su salud han afectado a su memoria inmediata, según fuentes de su entorno, si bien la ex mandataria asiste eventualmente a compromisos públicos a los que es invitada. Asimismo, Thatcher ostenta un escaño en la Cámara de los Lores tras los once años que pasó en el poder, al que llegó en 1979 y que se vio obligada a abandonar precipitada por sus propios compañeros de partido.

Además, el pasado agosto había vuelto al centro de la polémica política después de que el Gobierno de Gordon Brown se viese obligado a negar haber cerrado con la Casa Real un acuerdo para garantizarle un funeral de Estado, un privilegio reservado por norma en Reino Unido a los monarcas y que en el siglo XX tan sólo se concedió a uno solo de los sucesivos inquilinos del número 10 de Downing Street, Winston Churchill, tras su muerte en 1965.

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