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Horror: Genocidio israelí en Palestina
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Es una cámara de gas, pero con misiles. El que no muere por ejecución directa, muere por hambre, por sed, por enfermedades, por heridas...
En Tel Aviv la muchedumbre canta "Mañana no hay escuela, ya no quedan niños en Gaza! Olé, Olé, Olé, Olé"; "Gaza es un cementerio!"; o "Muerte a los árabes!" se puede escuchar y ver en este horrorífico video (enlace aquí). Mientras Gaza llora los niños asesinados en los ataques de Israel, decenas de manifestantes derechistas salen a las calles de Tel Aviv a celebrar los avances del Ejercito israelí profiriendo cánticos racistas. (RT). EXTERMINIO SIN LIMITES. Es una cámara de gas, pero con misiles. La solución final de Netanyahu y la cúpula militar israelí. La muerte llega por demolición, de los cuerpos y de la infraestructura. El que no muere por ejecución directa, muere por hambre, por sed, por enfermedades, por heridas y desmembramientos. Los médicos palestinos dicen que la mayoría de la gente muere desangrada. En los hospitales ya no queda casi nada. Salvo heridos muriéndose por falta de medicamentos. Ayer Israel bombardeó y pulverizó la única planta de electricidad de la franja de Gaza. Y el círculo quedó completo. La falta de electricidad (el recurso básico), convierte a Gaza en un cementerio de 7 kms de ancho por 42 kms de largo, con 1,7 millones de seres humanos hacinados, sin agua, sin electricidad, sin alimentos, sin medicinas, sin posibilidad de supervivencia mínima. La ONU habla de "tragedia humanitaria sin parangones". No hacen falta números y estadísticas. Basta usar la imaginación. Las agencias internacionales dan 1300 palestinos muertos y 6000 heridos. Las fuentes palestinas contabilizan 1500 muertos y más de 7000 heridos (que también equivale a estar muertos). Los chicos palestinos asesinados ya ascienden a 300. Las mujeres muertas superan los 500. En dos ataques el lunes a la noche, uno contra la ciudad de Rafah y otro contra el campo de refugiados de Bureij murieron 30 personas, incluidos diez mujeres y seis niños. Ya no hay límites. Y nadie sabe el final. Todas las negociaciones FRACASARON. La ONU se declaró impotente para detener la masacre. El Papa Francisco "reza por todos" y se retira a sus aposentos. Rusia, la única superpotencia que podría presionar para detener la matanza, anda enfrascada en su propia "guerra fría". Obama, el premio Nobel de la Paz, justifica el asesinato masivo diciendo que es una "guerra contra el terrorismo". Las potencias europeas optaron por el silencio. Y el primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu abandonó este lunes el lenguaje de la "tregua humanitaria" y advirtió que Israel se prepara para una operación militar muy larga. Y que no van a parar hasta cumplir el "objetivo esencial". A buen entendedor pocas palabras. Es la solución final. Solo la muerte previsible y anunciada como futuro. Y ninguna campana dobla por Gaza. Y ningún espíritu humano clama por piedad. Solo hablan los misiles. Por MANUEL FREYTAS / IAR Noticias
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